Me encantaba comer panquecas, más cuando las bañaba con la miel de los apiarios de mi Tío Vinicio, hermano de mi Tatá que se dedicó a sacar miel desde mucho antes que yo tuviera uso de razón por allá en La Victoria, Edo. Aragua. Por eso hoy, relaciono panquecas con la niñez y la alegría, las hago en casa para mi Diana con el mayor amor y cariño...la enseño a hacerlas, le compró la miel deliciosa del esposo de Julieta mi profesora de Yoga, que sabe tan maravillosamente divina como la de mi tío Vinicio...y además Daniel, mi pareja se anota en la onda de aprender a hacerlas y de consentirnos y ha creado panquecas con chocolate, mini panquecas, gorditas, esponjosas, bañadas con maple, con miel, con queso...y la última vez hizo unos aritos de cartón metalizados y los colocó en la sartén, vertió la mezcla y nos sirvió unas bellezas de panquecas que alegran la vida y la mañana de cualquier domingo, día ideal para hacer panquecas!
jueves, 6 de octubre de 2011
Las panquecas de los domingos
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1 comentario:
Esto atenta contra mi dieta, quisiera pasarla por alto sin desearlo, peeeero creo me estoy mintiendo a mi misma, son una delicia, y esta provoca comercela y olvidase de la dieta¡'¡¡¡¡
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