lunes, 9 de julio de 2007

María Paloma deleita los paladares


María Paloma deleita los paladares
de propios y visitantes
en La Asunción


Una margariteña que se ha destacado en el arte de elaborar empanadas, al punto que ha pasado de ganar concursos a ser juez de en este tipo de eventos

En la calle Matasiete de La Asunción está una empanadera que no es común. Ella abre a las 6 de la tarde y cierra a las 8, siempre y cuando no tenga gente. Incluso se da el lujo de entregar tickets de la cantidad de personas que acuden a su casa a comer el manjar tradiconal margariteño.
Se trata de María Díaz de Hernández, mejor conocida como María Paloma.

- ¿Por qué te llaman María Paloma?
- Porque cuando estaba pequeña todo lo hacía rápido, volando.
Por alguna de esas casualidades de la vida, a sus manos llegó una palomita pequeña que fue domesticando y ahora es prácticamente parte de la familia. De hecho una de las atracciones cuando María Paloma está haciendo las empanadas, es ver al ave posarse en uno de sus hombros, como lo haría cualquier loro.
A pesar de que está margariteña nacida en La Asunción comenta que se puso a hacer empanadas por necesidad hace 21 años, ya que debía salir adelante económicamente; parece que nació para el oficio.
Son más de 20 rellenos con los que puede pedir la empanada, que además tiene varios tamaños. Hay una empanada que le llama “jumbo”, que tiene todos los ingredientes y es del tamaño de la mitad de su brazo. Pescado, carne mechada, pollo, pepitotas, mariscada, chorizo, caraota, morcilla, panza guisada, asadura, lengua, berenjenas, brócoli, coliflor, papa, queso, jamón y queso; son parte del menú de sabores que puede degustar.
Estos además los puede mezclar con las diversas ensaladas y salsas que coloca la anfitriona para acompañar las empanadas, sin costo alguno. Es así como encontrará sobre la mesa una ensalada de mango, remolacha o repollo con ensalada. Las salsas pasan por una crema de berenjena que ha sido ovacionada por famosos, hasta un guacamole que es para chuparse los dedos.
María confiesa que le gusta esmerarse en la preparación de su comida para ver la cara de satisfacción de la gente cuando prueba sus creaciones.
-Yo no uso tomate –dice- porque pone ácida la comida. Prefiero combinar la cebolla, con el ají, ajo y pimentón.
Esta dedicación le ha hecho ganar concursos de gastronomía local y ha sido varias veces jurado en la Feria de la Empanada que se hace en La Asunción.
Igualmente es buscada para que elabore sus creaciones culinarias en bodas, eventos corporativos y culturales. Comenta, por ejemplo, que fue quien le hizo las empanadas a los presidentes que estuvieron recientemente en Margarita debido a la Cumbre Energética.

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